sábado, 4 de junio de 2011

Kim Ki-duk


Kim Ki-duk me hace reflexionar acerca de como acciones que para nosotros son normales pueden ser vistas desde un ángulo extraño y sospechoso, me dejan con un gusto no tan bueno, como que me dan la sensación de desolación, acabo de terminar de ver "El arco", como un anciano puede obsesionarse con una pequeña que empieza a darse cuenta de como es el mundo, que empieza a abrir los ojos, ella la maneja, la manipula, y ella lo deja... como puede ser para ella algo normal y que para mi es inconcebible, y como otras personas podrían ver en mi acciones ridículas mientras que para mí es algo natural. Oriente es complicado y a la vez fascinante... lleno de simbolismos e historias que no conoceré, secretos ocultos bajo un velo de misterio. Hoy agradezco estar del otro lado de la balanza, es hermoso oriente para contemplarlo, pero no sé si podría vivir con esa capacidad de pensamiento que me lleve a las acciones que ellos realizan. Me gusta ver el reflejo de esa sociedad, para allá occidente va, pero aún así me enriquezco de la ignorancia que poseemos aún acá.
Oriente... oriente... árabe... reflejo de mis pensamientos secretos.

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